En una tarde común en Oxkutzcab, la atención de un vecino fue capturada por una escena inusual en su patio: una paloma mensajera extraviada.
El hallazgo fue más intrigante cuando descubrió que el ave portaba consigo un mensaje procedente de Portugal, con fecha de 2021. La situación tomó un giro aún más misterioso al notar que la paloma llevaba dos tubos anulares, uno azul y otro negro, entre sus patas.
Con una curiosidad creciente y un sentido de responsabilidad hacia el ave, el vecino decidió tomar cartas en el asunto y rescatar a la paloma, proporcionándole el cuidado necesario hasta que estuviera en condiciones de continuar su viaje. Los anillos en las patas de la paloma no pasaron desapercibidos; grabados con el nombre de Portugal y el año 2021, revelaban una historia más grande de la que el vecino era consciente en ese momento.
Además, en una de las patas se podía distinguir un código, posiblemente indicativo de un microchip.Aunque la tentación de abrir los mensajes pudo haber sido fuerte, el vecino optó por mantener el misterio intacto, dejando que la paloma siguiera su curso natural. Con la esperanza de que el mensaje llegara a su destino final, el vecino observaba con expectación el vuelo de la paloma, deseando que su viaje fuera seguro y exitoso.