La Secretaría de Marina (Semar) realizó un operativo en el sur de México, logrando uno de los mayores decomisos de cocaína en los últimos años. La droga fue encontrada en las aguas cercanas a Barra Tonalá, Chiapas, con un valor estimado de más de 500 millones de pesos.
Marinos, elementos de tierra y personal aéreo trabajaron en conjunto para interceptar dos embarcaciones sospechosas. En total, aseguraron más de 2,000 kilogramos de cocaína, evitando que llegara a su destino final.
Este decomiso es parte de una estrategia para combatir el tráfico de drogas en México y la región. Gracias a una rápida respuesta de las autoridades, se logró frenar el movimiento de esta mercancía ilegal. La droga incautada equivale a 25 millones de dólares, lo que representa un duro golpe para el crimen organizado.
Más allá del decomiso, el impacto económico sobre los grupos criminales es significativo. La pérdida de 500 millones de pesos afecta la estructura financiera de estas organizaciones y debilita su capacidad operativa.
El operativo refuerza el compromiso del gobierno de Claudia Sheinbaum para reducir la violencia ligada al narcotráfico. En lo que va de su administración, se han incautado 26 toneladas de cocaína y confiscado embarcaciones, motores y combustible.
Este caso se suma a otro decomiso reciente, en el que la Semar interceptó una embarcación en aguas internacionales con 590 kilogramos de cocaína. En ese operativo, fueron detenidos dos ciudadanos ecuatorianos vinculados a redes internacionales de tráfico de drogas.
El combate al narcotráfico sigue siendo un reto para México y la región. Aunque estos operativos logran afectar el tráfico de drogas, la violencia y la operación de los cárteles siguen siendo desafíos que requieren esfuerzos continuos y cooperación internacional.
Con información de La verdad
bvp