Con éxito, Irán puso en órbita una cápsula de prueba para astronautas, como parte de su programa espacial que se ha fijado más metas.
Irán puso en órbita una cápsula para astronautas de prueba, en un nuevo paso para enviar al espacio a la primera misión tripulada iraní, planificada para 2031.
La cápsula de 500 kilogramos se situó en una órbita de 130 kilómetros tras su lanzamiento, informó el Instituto de Investigación Aeroespacial de Irán, organismo al cargo del ensayo, según recogen medios de ese país.
La misión tenía como objetivo poner a prueba el lanzamiento, la velocidad del control de los sistemas, el diseño aerodinámico y otros aspectos del aparato, indicó el portavoz del Instituto de Investigación Aeroespacial, Hossein Dalirian.
El vocero calificó la prueba como “muy buena”.
Los medios iraníes calificaron el aparato como una “cápsula biológica”, pero no especificaron si contiene animales u otros seres vivos.
El lanzamiento forma parte de un plan para enviar al espacio la primera misión tripulada iraní, prevista inicialmente para 2026, pero que posteriormente se ha postergado para 2031.
“La industria espacial de Irán progresa con rapidez, y si Dios quiere, habrá otras buenas noticias antes del final este año (el calendario persa finaliza el 20 de marzo)”, aseguró el ministro iraní de Telecomunicaciones, Isa Zarepour, después del ensayo de ayer.
Irán lanzó al espacio un cohete con un mono a bordo, que regresó a la Tierra con el animal indemne en 2013.
Irán puso en órbita su primer satélite en 2009. En 2017 inauguró el Centro Espacial Nacional Imán Jomeiní y lanzó un cohete portador del satélite Simorgh.
En abril de 2020 logró poner en órbita su primer satélite militar, después de varios fracasos. Irán es uno de los menos de una docena de países que tienen capacidad de lanzamiento espacial.